Con las mejoras que a continuación describo se consiguen dos cosas, por un lado obtenemos una mayor solidez del trípode con lo que se evita en gran medida las vibraciones del mismo, realmente incomodas para observar, y por otro lado, y principal objetivo de la operación, se consigue una mayor resistencia y capacidad de carga.
Básicamente lo que hacemos es fortalecer todos los puntos débiles del trípode, que en esencia se resume en reforzar todos los puntos de unión, que de serie viene con piezas de plástico duro inyectado (tipo resina o baquelita) y por tanto huecas, así como los tubos huecos que conforman las patas que son de aluminio simple y realmente fino, casi da miedo al desmontarlo y ver lo frágil que parece.
Lo primero que haremos una vez desmontado el trípode, es sustituir los tornillos de unión entre las patas y la base principal (donde se aloja la montura) por unos de mayor dureza, pues los que vienen de origen son poco mas que hierro dulce ( 4.8 ) por otros de acero ( 8.8 )
Para reforzar los puntos de unión de la parte superior del trípode
procederemos al rellenado de todos los huecos con masilla de dos componentes
en mi caso utilice las barritas de Pattex que se han de amasar para mezclar los componentes hasta obtener un color uniforme, esta masilla se endurece en 5 minutos, con lo que recomiendo ir haciendo pequeñas cantidades cada vez. Con esta masilla rellenamos los soportes, y en la parte inferior añadimos dos clavos, más adelante explicare su utilidad. Además del relleno de masilla añadiremos dos arandelas en los agujeros para elimiar la holgura existente entre los topes y la parte interna del tubo, ya que cuando montemos estos topes no lo haremos sugetandolos únicamente por un lado como viene de origen, sino que haremos un agujero pasante y pasaremos un tornillo con tuerca en la parte interior de la pata. Evidentemente no nos valdrán los tornillos de serie (muy cortos para nuestro proposito) habrá que sustituirlos por otro más largos con sus tuercas y arandelas correspondientes. Más adelate veréis como queda.
El rellenado de los tubos lo he hecho con listones de pino que se encuentran fácilmente en Leroy Merlin. Si se tiene la posibilidad de hacérselos uno mismo, mejor que los haga de haya o roble, maderas mucho mas densas y de mayor dureza. Las medidas de los listones son:
-3 listones de 1000x27x27 Para rellenar el tubo inferior más grueso.
-6 listones de 900x7x27 + 6 listones de 900x7x18 Para rellenar los tubos superiores más delgados.
Huelga decir que para el cortado y moldurado de los listones se han debido de tomar correctamente las dimensiones de los mismos.
Comenzaremos por los tubos inferiores (gruesos). Observaremos que en la parte superior llevan un tapón de plástico sujeto con un tornillo, y en la parte inferior llevan un tope también de plástico con las puntas que se clavan en el suelo, sujeto al trípode con un tornillo pasante, este tornillo no hace falta sustituirlo por otro de mayor dureza porque realmente no hace ninguna función mas que sujetar el tope. Retiramos ambos topes y vemos que son huecos. Estos huecos los rellenaremos con el mismo listón que ha de rellenar el tubo, para lo que hemos de moldurar los extremos de los listones con la forma adecuada para que quepan dentro de los topes.
Introducimos el listón en el tubo, entra muy ajustado lo que evitará holguras. Es posible que tengamos que lijar un poco las aristas del listón para no forzar en exceso el tubo. Una vez introducido el listón montamos los topes. Para montar el tope inferior ha que taladrar el listón (una vez montado) para poder meter el tornillo pasante que hemos retirado anteriormente.
Previo al rellenado de los tubos superiores, hay que retirar la abrazadera en la que se aloja la palomilla para fijar la extensión deseada de la patas del trípode, dicha abrazadera está sujeta al tubo con remaches, con lo que para retirarla hay que romper dichos remaches con una Dremel o una pequeña radial.
Estos remaches impiden introducir los listones hasta el final, dejando sin refuerzo uno de los puntos críticos del trípode. Del mismo modo hay que retirar los soportes de la cruceta central de unión (donde la aloja la bandeja portaoculares), dado que los tornillos impiden que metamos correctamente los listones.
Para rellenar los tubos superiores utilizamos los listones finos, en esta caso uno de cada medida por tubo, hay que encolarlos he introducirlos en los tubos antes de que la cola se seque.
Una vez los tubos esta rellenos pasamos a poner los topes, los de la parte superior son los que unen las patas a soporte central y que previamente habíamos rellenado con la masilla y les habíamos puesto los dos clavos, es ahora cuando entenderemos la función de estos, pues lo que hacen es clavar los topes a los listones de relleno lo que evitará que todo el trabajo de unión de ambas piezas (tubo-soporte) lo haga el aluminio del tubo, y prevenir de este modo posibles roturas del mismo por este punto. En la sigiguiente foto podéis ver los tornillos pasantes a los que me refería al principio del texto. Mucho cuidado cuando hagáis los agujeros de la parte interior, han de estar perfectamente alineados con los que ya tiene el tubo de origen en la parte de fuera.
Por otro lado hemos de recolocar la abrazadera que habíamos quitado eliminando los remaches, estos los sustituimos por tornillos de rosca para madera, ya que van ha roscar en los listones de relleno, teniendo en cuenta el añadir unas arandelas para que la superficie de presión sea superior a la que únicamente ofrece la cabeza del tornillo, recordemos que las abrazaderas está hechas también de plástico.
Reforcemos ahora dichas abrazaderas. Esto lo haremos con abrazaderas metálicas de tornillo, de las que se usan para sujetar tubos, fáciles de encontrar en cualquier ferretería.
Este refuerzo es esencial, dado que si lo que fallase fuese una de estas abrazaderas, todo el conjunto se iría al suelo sin remedio.
Volvemos a colocar los soportes de la cruceta central utilizando de nuevo tornillo rosca madera de mayor longitud que los que originalmente lleva el trípode.
Una vez montados todos los soportes pasamos a montar la cruceta, también de plástico y con mucha holgura, para minimizar dicha holgura, añadiremos arandelas en los huecos que quedan entre el soporte y la cruceta.
Con esto damos por finalizado el reforzamiento del trípode, tan solo queda por agenciarse con una pesa de 5 kg de las que se venden en Decathlon para lastrar el trípode cuando lo estemos utilizando. Para fijarlo utilizaremos la bandeja portaoculares que habremos taladrado previamente. Una vez sujeta la pesa, conferimos a la cruceta una solidez desconocida anteriormente.
El precio aproximado de todos los materiales empleados esta entorno a los 35€. No hace falta decir que si alguien encuentra un trípode más robusto por un precio similiar, que ni lo dude, puesto que por muchas mejoras que le hagamos al nuestro, un manufacturado de fabrica siempre será mejor.
