Ayer por la noche estuve "reviendo" (la he visto dos o tres veces) la película de terror y ciencia-ficción Horizonte final (Event horizon, 1997).
Con esta película, protagonizada por Sam Neill y por Laurence Fishburne me pasa como con Alien: cuantas más veces la veo, más me gusta.
Argumento: En el 2047 se detecta una señal de radio-baliza procedente de la órbita de Neptuno que resulta ha sido enviada por la "Event Horizon", un prototipo de nave interestelar propulsada por un motor gravitatorio capaz de deformar el espacio-tiempo mediante un agujero negro artificial. La nave había desaparecido con toda su tripulación en el curso de su primera y secreta prueba en 2040.
La "Lewis y Clark", una nave de búsqueda y rescate capitaneada por el capitán Miller (Laurence Fishburne) parte hacia Neptuno llevando consigo a la persona que mejor conoce la "Event Horizon", el Dr. William Wier (Sam Neill), diseñador del motor gravitatorio y hombre traumatizado por la trágica muerte de su mujer (suicidio) unos años antes. Cuando alcanzan la nave perdida, se dan cuenta de que algo extraño ha ocurrido en ella, pues no hay supervivientes.
El diario de a bordo muestra que, tras activar el motor gravitatorio, la nave acabó en algún lugar muy distinto de Proxima Centauri, el destino original. El agujero negro les condujo a una extraña dimensión en la que los tripulantes parecieron enloquecer y se lanzaron a una sangrienta orgía de muerte, salvajismo y autodestrucción. Y esa locura también empezará a afectar a los tripulantes de la nave de rescate, incluido el doctor Wier. En realidad, en ese extraño universo en el que acabó en su primer viaje, la nave se convirtió en un ente vivo y malévolo que convierte en realidad los traumas, miedos e instintos salvajes de los tripulantes. Wier llegará a simbiotizarse con la nave, cuyo propósito es regresar a esa dimensión de caos absoluto con nuevas víctimas. Sólo el sacrificio de Miller permitirá escapar del infierno a tres supervivientes...
Como decía, cuanto más veo esta peli de ciencia-ficción gore más me gusta, porque puedo ir fijándome en más detalles del guión y la producción. Muy acertadas me parecen las cápsulas llenas de líquido que emplean los tripulantes de la nave de rescate para resistir la alta aceleración que permite al vehículo llegar a Neptuno en un tiempo razonable, aunque lo del "motor iónico" que se cita al principio, durante la revisión de sistemas, no me cuadra, ni con esa aceleración ni con las toberas de la nave, que más bien apuntan a algún sistema nuclear térmico o de antimateria.
Hay otros detalles a criticar (fuera de lo fantasioso del argumento, pero aceptemos barco como animal acuático...
). Por ejemplo, el título en castellano ("Horizonte final"), salido de la mente retorcida de algún ejecutivo ignorante de la distribuidora española. El título en inglés era mucho más claro: "EVENT HORIZON", nombre de la nave y del fenómeno físico del "horizonte de los sucesos" de los agujeros negros, la frontera que marca el punto de no retorno de esas extrañas distorsiones espacio-temporales. El guionista juega así con el nombre de la nave maldita, de la que nadie puede escapar...
Otra cosa que no me gusta del guión es el argumento de los agujeros negros: nada se dice de cómo la nave evita la singularidad central, y ello me lleva a pensar que el guionista en realidad trataba de referirse a los "agujeros de gusano" que teóricamente permitirían conectar de forma instantánea dos puntos distantes de nuestro universo, conducir a otro tiempo e incluso a otro universo. Tampoco se aclara la naturaleza de esa "dimensión" infernal que se presenta como de "caos absoluto" y de maldad total... El caos puede incluirse en la física, pero la bondad y la maldad son categorías morales y no entiendo cómo van a tener una existencia propia fuera de los seres conscientes que las experimentan...
Os dejo con unas imágenes de la peli.
