Bueno, por algo se empieza: cómo recoger micrometeoritos, asunto que no es baladí
Otro tema es eso de subirse a los tejados. A mi en familia y círculos de amistades, así como vecindario, ya me consideran un chiflado

, pero se muestran comprensivos por ahora, y prueba de ello es que han abierto una suscripción para comprarme un gorro picudo lleno de estrellitas. Ahora bien, indudablemente si me ven "chupandocanalones" tendré un serio problema, pues seguro que acabarán llamando a los loqueros. Es decir, esto mientras el tejado sea mío o el de algún amigo o conocido. Porque, si es ajeno y la acción de recogida es sin permiso, la Guardia Civil no tardará en hacer acto de presencia y yo terminaré ante el juez de guardia, además, y posiblemente en las páginas de sucesos en algún periódico.
Esperemos que esto no se convierta en una nueva moda, y pase como con la temporada de las setas, sólo que transportada a los momentos que hay a continuación de las más diversas y variadas lluvias de meteoritos. Después de cada una, a esperar las lluvias siguientes, o a tomar la escalera y a jugarse el tipo como los gatos.
