Hoy he comprobado el estado del espejo a la luz natural: horror de los horrores. Parece el ford fiesta blanco que tuve hace 20 años en Alicante después de una de las típicas lluvias terrosas de nubes del desierto argelino.
Mira que yo soy feo, pues na, ni me reflejaba.
En serio, muchas gracias por todos vuestros consejos. Estoy seguro que tienes razón Adrián, es un poco de todo; pero hombre, fiaros un poquito de mi palabra, llevo unas pocas sesiones con ambos telescopios y con iguales accesorios y condiciones noto una diferencia realmente perceptible.
Aunque de momento la aventura del desmontar, limpiar (si, si con agua y jabón) y volver a montar tendrá que esperar.
A ver si renuyevo primero el resto del equipo y despues que me haga con la nueva montura pruebo ha pelearme con el gso.
Saludos!