Es viernes, las 1 de la tarde, y hace mucho calor. El coche está cargado hasta las trancas, listo para emprender el viaje. Imaginaos una berlina con un 16”, por muy compacto que sea, unas escaleras grandecitas, demás bultos y 3 personas…
El viaje se hace pesadillo, pero las expectativas ante lo que nos espera son grandes, así que se lleva bien.
Llegamos al camping a las 7 de la tarde, una hora estupenda para ir montando la tienda de campaña, saludar a los pocos que conocía en persona (a decir verdad, sólo a Jesús y Patricio, que llegó más tarde), y presentarme a todo el que me iba encontrando por ahí. Después de adecentar la tienda, sacar cachivaches varios, etc, nos acercamos a la zona de observación a echar un vistazo, donde la gente empezaba a montar sus equipos. Allí conocí en persona a Don Quijote, que tenía montado su telescopio solar, así que aprovechamos para echar un vistazo. Una gran “llamarada” llama nuestra atención. Uno de los que se acercaron a observarlo nos asegura de que se trata de una quema de rastrojos incontrolada, jejeje

Tras un pequeño paseo por los diferentes puestos, bajo con cierta prisa a por el coche, ya que veo que no para de llegar gente y cada vez quedan menos sitios donde plantar el telescopio, jeje. Un empujón por aquí, un codazo por allá, y me pongo entre Saturn3 y Alhena. Buen sitio, arriba del todo de la explanada, con todo un 20” a izquierda y una mujer con grandes conocimientos astronómicos a la derecha! Benito aprovecha que aún hay luz para comprobar in situ qué modificaciones he hecho en mi telescopio, similar al suyo. Yo me dedico a sacar alguna foto, con los últimos rayos de luz.




Buena, la primera noche de observación, con un cielo bastante oscuro. La Vía Láctea luce en todo su esplendor desde que cae la noche, aunque es a partir de las 2 o 3 de la madrugada cuando luce más, nunca mejor dicho, con una zona del Cisne y Escudo impresionante, claramente visible la bifurcación hacia Escorpio y Sagitario. Con razón alucinaba tanto el grupo de Alhena observando desde una tumbona con los prismáticos (perdón por no saber cómo os llamáis, ¿Calu se llamaba alguien?)…Gracias por enseñarme el Stargate!
Dediqué esta primera noche a estrenar el T2 con los objetos veraniegos, que era algo que me hacía muchísima ilusión; no obstante es la zona del cielo con la que me inicié en la astronomía y le guardo un especial cariño.
Así que después de enseñar a mis familiares los objetos más espectaculares que se pueden ver a primera hora de la noche, ya que se iban temprano a dormir, y de echar un rato con los últimos retazos primaverales en forma de galaxias, clúster de Coma-Virgo, Leo, etc, la impresionante zona formada por Sagitario, Escorpio, Escudo y demás ha levantado lo suficiente como para babear con los objetos que esconde. Qué decir de esa Omega, esa Laguna, de ese paseo por la nube del Escudo, de esos Velos!!!

Aprovecho esta primera noche en que no se acerca mucha gente para deleitarme y recrearme con lo que estoy observando, intentando hacer memoria respecto a lo que veía con mi antiguo y querido LB12. En muchos objetos la imagen es casi fotográfica, una maravilla! Viendo semejantes imágenes, ¿cómo no engrandecerse el espíritu? El amigo Benito me deja un NPB, y rápidamente me doy cuenta de la falta que me hace este filtro para nebulosas. Impresionante lo que ganan los objetos, sin perder calidad las estrellas!
Por cierto, se me olvidaba comentar una anécdota que me sucedió con mi hijo: le pongo M57, que no había visto nunca, ni en fotos ni de ninguna otra forma, y me dice, “andaaaá papi, una nebulosa verde oscuro y verde clarito, qué chuliiii!!!”. Mierda niños!!! Se ve que yo me quedé en el Nodo, lo veo todo en blanco y negro

Son las 4 de la madrugada, y el día ha sido realmente largo, el gran Cuadrado de Pegaso levanta por el este, se intuye el borroncito de Andrómeda asomando por el horizonte. Toca recoger, bastante ha aguantado el cuerpo! Ha sido una buena noche, con el pequeño contratiempo del seeing, que no permitió meter aumentos, pese a lo que diga el TOA del amigo Murnau

Mañana másss!
El sábado comenzó bien tempranito, para lo cansado que estaba. Es lo que tiene dormir en una tienda de campaña y que te dé el sol a las 8 de la mañana…
Dicen que el que no se consuela es porque no quiere, y yo tenía un fantástico consuelo como contrapunto a la p. de dormir poco: una estupendísima observación solar programada para las 10 de la mañana, con la mayor concentración de telescopios de este tipo que he visto en mi vida, a bote pronto calculo que habrían 7 u 8. Fantástico ambiente!


Quiero agradecer especialmente la desinteresada colaboración de los propietarios de estos equipos, siempre dispuestos a enseñar, con grandes dosis de paciencia, y con unas enormes ganas de compartir su ilusión. Os aseguro que difícilmente se me van a olvidar nunca las espectaculares imágenes que vimos del Astro Rey! Foto de grupo y rumbo a los Callejones.
Patricio ejerce de guía de lujo en la visita a este peculiar enclave. Comienza ésta con una detallada introducción en la que nos explicó el porqué de estas singulares formaciones rocosas, nos habló de antiguos mares, de apartadas playas, de millones de años atrás.



Es un sitio que merece la pena visitar, sobrecogedor por momentos, con angostos pasadizos que nos hacen sentir como aventureros de otros tiempos. No faltó una explicación para cada peñasco, para cada matojo, que nos íbamos encontrando

Al acabar la visita, como aún faltaba una hora para comer, decidimos visitar los Miradores por nuestra cuenta. Es un lugar majestuoso, un espectáculo para los sentidos, con unas vistas impresionantes, como demuestran las fotos que hicimos.

Eso sí, si vuelvo otro año, alquilo un 4x4 para carrilear por allí, pobre mi coche!

De vuelta al camping la gente se agolpa en el restaurante, con el firme propósito de liquidar las existencias cerveceras del establecimiento, y es que, qué bien sienta una servesita a esas horas centrales del día!
Tras la comida llega el momento de hacer disfrutar a la chiquillería con diferentes actividades. Los más pequeños se lo pasan en grande con el lanzamiento de los cohetes de agua. Qué alegría en sus caras, qué ilusión!

Mi niño alucinó, jeje, llevaba dos semanas esperando ese momento. Gracias, Moladso y demás colaboradores, en el nombre de los dos!
Luego vino la charla lunar para las nuevas generaciones (aunque algunos mayores, ejem ejem…).


Momentos entrañables: esas caras de los niños y no tan niños oyendo las explicaciones que daba el maestro, ese bombardeo de meteoritos, ese regolito volando por los aires, esos no tan niños tirando piedras… Cuántos grandes momentos! Gracias!

No faltó después una estupenda gymkana, en la que se lo pasaron en grande. O eso dicen, ya que el que suscribe se retiró a intentar descansar un rato, ya que aguardaba una larga e intensa velada astronómica por delante y sólo había dormido 2 horas la noche anterior...
A eso de las 8 de la tarde la zona de observación estaba ya bastante concurrida, con la gente montando equipos con el sol aún a cierta altura sobre el horizonte. Monto el dobsoniano rápidamente, por hacerme sitio más que otra cosa, ya que se monta en un cuartillo de hora.

El primario ha estado todo el día dentro del coche y creo que está por lo menos a 30 grados… ya veremos si se aclimata en algún momento de la noche… Como aún había bastante claridad, aprovecho para hacer unas fotos de la gente y los equipos, mientras el cielo se va cubriendo con ese manto oscuro cuajado de estrellas, tan mágico para nosotros.


Saludo a Carlos, que ha venido con su refractorcillo, y a Alceo y a su pareja, al que conocí en una transacción astronómica. Con ellos compartí bastantes objetos a lo largo de la noche, un placer teneros cerca.
Alguno que yo me sé ha tenido la feliz idea de organizar una mini observación (por aquello de que iba dirigida a las nuevas generaciones) con un LB12. Fantástico! Un 10 para Enrique, por la paciencia y buen hacer que demostró para con los peques.

Mi pequeño diablillo se retiró pronto, pero gracias de todas formas! Creo que es la primera vez en la vida que me dice que quiere irse a la cama, que está muy cansado y quiere dormir. Qué bien lo han pasado los niños estos días por allí sueltos, haciendo de todo! Acostumbrados a las rigideces de la vida diaria en ciudad, ha sido un fin de semana extraordinario. El mío ha vuelto a casa loco de contento, supongo que como todos, preguntándome que cuándo íbamos a ir a otra

En fin, que se me va la pinza… Los niños se lo han pasado en grande, pero ahora me toca a mi! Pienso darle un repaso a todo el catálogo Messier a tiro, además de a numerosos Ngc´s, y a fe que lo conseguí!
A las 11 y cuarto es noche cerrada. Quizás el cielo esté más grisáceo que el viernes, aunque a mí me da la sensación de que el seeing es mejor, ya que le pude poner el Ethos 8 a numerosos objetos sin problemas. El viernes con el 13 veía las estrellas más gordotas que el sábado con el 8. Raro, raro.
Igual que la noche anterior, empiezo por la zona oeste, dando un repaso a la Cadena de Markarian, las Antenas, el Sombrero, el Triplete de Leo, la Aguja, la Ballena, el Ojo Negro, etc. En las más vistosas me entretengo un poco más, jugando con los aumentos. Impresionantes el Sombrero y M82 con el E8, a 250 aumentos, ¿eh, Carolus? No anda descalzo el hombre, con un TEC160… pero tenía ganas de comprobar qué tal va mi 16”. Qué bien se veía la estrella central en la Dumbbell y sus diferentes tonalidades de gris, qué pasada los brazos de M51! Parece que le gustó, aunque más me gustó a mí ver M11 con esa increíble puntualidad por su refractor.
Después del repaso a la zona oeste me detuve un rato en las galaxias que hay entre Phad y Chara para pasar a los globulares de Sagitario y Ofiuco, sin olvidarnos de M3, M5, M13... Empacho de globulares! Hoy me quedo con M5.

El ambiente de la noche, estupendo! Qué camaradería, qué hermanamiento! Los típicos “Ven, que te enseñe tal galaxia”, o “joer, qué bien se ve esto con tu ocular” y frases así que tanto conocemos. Toda la noche hubo un continuo trasiego de gente deseosa de probar diferente material al habitual, de noveles con ganas de ver por primera vez determinados objetos. Jesús creo que llevaba un pase vip colgado del cuello, ya que siempre que se acercaba a mi telescopio se saltaba la cola del que estuviera esperando para observar algo


Ese ambientillo fue lo que más me gustó de la noche, además de M13 y M51 a 300x

Con el OIII puesto en el E21 y 13, según el objeto, damos un repasito a las nebulosas más vistosas del verano, la Laguna, la Omega (impresionante visión, casi en relieve), el Águila, los Velos, ufff, el Anillo, la Dumbbell y a alguna planetaria menos llamativa…
Benito me habla de no sé qué catálogo (Hickson, muy agradecido!) en el que hay muchos grupos de galaxias para observar con palanganas, y contemplamos uno de ellos bastante vistosillo con su 20”, compuesto por 4 galaxias que entran en el campo del 13, perfectamente visibles todas ellas. Luego las observo con el mío, aunque pierden un poco de vistosidad.

En una de las idas y venidas de Patricio aproveché para sonsacarle algún objeto raro y vistoso que yo no conociera, y dio sus frutos, ya que me enseñó un conjunto galaxia-cúmulo abierto precioso! (A ver si me dices qué número tienen, porque no los encuentro…).
En fin, la noche dio mucho de sí. Casi a las 5 desmonté el chiringuito para irme a “dormir” a la tienda. Ya quedaban pocos insurrectos por allí, y me esperaba un largo viaje de vuelta, no tan animoso como la ida, aunque con las alforjas cargadas de recuerdos.
En este punto quiero pedir disculpas a personas que no he nombrado, con quien gustosamente compartí telescopio en diferentes momentos de la noche, pero que por timidez o por tener la cabeza en otra cosa no caí en preguntarles el nick del foro. Si leéis esto, me encantaría poneros nombre. Perdón!
Al día siguiente nos levantamos pronto, para variar, y aprovechamos para desayunar temprano y desmontar todo el tenderete. Tras despedirnos de los conocidos que encontramos por allí emprendemos el largo regreso a casa.

Ha sido un fin de semana inolvidable. Se suele utilizar con demasiada profusión esa frase, pero este finde es de los que quedan grabados para toda la vida. Hemos hecho un montón de nuevos amigos y lo hemos pasado en grande!
Espero volver a coincidir con vosotros el año que viene!! Eso sí, cuando se me olvide la paliza kilométrica

Hasta pronto!

pd. Esta noche aderezo un poco la narración con fotos, espero que os guste
