
Se sabe que de los pacientes que van a la consulta del médico con un dolor agudo en la tripa, el 85% de los casos son gases y un 15% es apendicitis.
Una noche nos duele bastante la tripa y nos vamos a urgencias. Tenemos suerte porque nos toca un médico que tiene un 80% de aciertos en sus diagnósticos por lo que estamos tranquilos.
El médico nos toca un poco la tripa y dice que tenemos apendicitis y ya está sacando el bisturí ... ¿Qué sería lo prudente que deberíamos hacer?
O dicho de otro modo, ¿cuál es la probabilidad de que tengamos apendicitis de verdad? ¿y gases? ¿y si el médico nos dice de primeras que son gases como cambiaría la cosa?
Un saludo