Dimensiones espaciales adicionales, parece que deben existir en el mundo cuántico.
Son precisas para el desarrollo de teorías como la de Supercuerdas, o la M, del Todo, integrantes de la Gravedad con las demás fuerzas.
Si consideramos que las cuerdas elementales vibran en más dimensiones espaciales que las tres clásicas, tenemos la puerta abierta para aceptar que la Gravedad, se manifiesta a través de una no considerada hasta ahora.
Las analogías expuestas por Kaluza-Klein, son difíciles de mejorar, pero cada cual, puede formarse una idea más conforme a su propio entender. (Y los espacios Calabi-Yau).
Como se indica que las dimensiones extra, se hallan arrolladas, u, ocultas en valores extremadamente pequeños, (Planck), yo sugiero profundizar, imaginándolas dentro de las conocidas.
Así, un átomo que se desplaza por una dimensión macro, manifiesta su movimiento lineal, como un vector, resultado de la composición de su movimiento a través de los ejes cartesianos X, Y, Z.
Pero tal átomo, a su vez vibra, mientras se desplaza. Es el movimiento extra revelado por De Broglie, correspondiente a todas las partículas.
Incluso hasta aquí, llegamos sin inmiscuirnos en más dimensiones que las tres generalmente aceptadas.
En definitiva, este átomo, sigue una trayectoria que aún resultando lineal, ha invadido los tres ejes del Espacio. Manifiesta sus dimensiones materiales ancho, largo, alto, a la par que se han desplazado asimismo por un espacio contenedor de las mismas.
Mientras se desplaza este átomo, sus integrantes cuerdas, vibran sin desprenderse de su vehículo integrador. Pero ya no lo hacen a escala macro, sino a la de Planck. No ocupan espacios misteriosos, son los mismos espacios que ocupa su átomo. O sea, se hallan en su interior.
Sin embargo, lo que realizan en su vibrar, es cosa no visible, solo inferible. Y también lo hacen en otras dos dimensiones dentro del átomo, además de la que ya disponen por ser pasajeras de él.
Pueden realizar pues, un total tres movimientos en cada uno de los ejes X, Y, Z, por los que transcurre el átomo, mostrándonos como así, las dimensiones alcanzan un total de nueve. Luego le sumamos la temporal, resultando diez.
Sin olvidar que seis de ellas, son diminutas en extremo, tal que por ahora, su valor, se considera infranqueable.
Sin embargo, algún día podrá salir una nueva teoría, que continuando la serie mentada, aduzca razones para atribuir otras dos extras para cada una de las nueve, obteniendo el resultado de veintisiete más la temporal veitiocho.
-¿Algún otro enfoque podeis aportar?.
Saludos del Abuelo.
