Hace unos meses que termine de construirme mi nuevo Dobson de tubo abierto de 41 cm. Deciros que me llevó varios años autoconvencerme de que me sería posible hacerlo, de que podria cargar con él y de que podria mejorar las prestaciones de mi excelente Newton de 26 cm. Aun así decidí intentarlo, pese a que era consciente de que las condiciones climaticas de la ciudad donde vivo, Valladolid, eran poco adecuada. Mis previsiones eran de que podría utilizar el nuevo telescopio tan solo unas pocas veces al año. Así ha sido. Como dice el compañero de mas arriba, los problemas se multiplican exponencialmente a partir de los 25-30 cm. Creo que esta apertura (25-30 cm) es la que mejor relacion entre problemas y beneficio proporciona. Mi 41 cm esta equipado con un espejo de BVC (black vitrified ceramic) adquirido en Canada y curvado a f/4.5 y luego tallado por Jose Mª Aledo, de Barcelona. Este material determina que el espejo sea relativamente ligero con relacion al mas comun Pyrex. Aunque el telescopio es de tubo abierto, el peso total del telescopio es importante (40-50 kg?). Ademas no conviene olvidar que lleva varios elementos opticos en su interior, con lo que su movimiento requiere muchas precauciones para evitar golpes, etc. La conclusion es que mi nuevo telescopio de 41 cm vive en arresto domiciliario. El tema de cómo le afecta el seeng es muy a tener en cuenta. Noches con mala estabilidad atmosferica que son utiles para observar con un 25 cm son inservible para el 41 cm. Ello a pesar de haberle equipado con excelentes oculares Nagler. El tercer aspecto a destacar es la necesidad imperiosa de colimar el telescopio antes de cada sesion de observacion. Yo, que no tenia problemas de colimacion con mi 25 cm, he tenido que empezar de cero y hacerme un experto en colimacion para alinear mi nueva optica. Y en ello ando todavia. Como resultado de lo que os he dicho anteriormente, entre sacar el telescopio de su alojamiento, montarle, colimarle, desmonatarle y guardarle, se me va una cantidad apreciable de mi tiempo total de observacion. Eso sí, gimnasia hago bastante. Con mi climatologia local, esto en ocasiones supone no observar nada en absoluto. Y todo ello teniendo en cuenta que mi espejo de BVC se enfría casi solo. En fin. Lo que decia el compañero. Los problemas se multiplican exponencialmente. Menos mal que construi mi telescopio con un espejo de 40 cm en vez de 50, que era lo que queria inicialmente. Aun así, deciros que, desde mi patio trasero (tengo niños pequeños y no dispongo de tiempo para ir al campo), mi nuevo 41 cm me permite observar debiles galaxias de mag +15.3 y esas pocas sesiones utiles de observacion al año son realmente memorables. Mi consejo es: sólo si estas realmente obsesionado con el cielo profundo, adquiere un telescopio grande. En caso contrario coge el que tienes y llevalo al campo. My 25 cm en el campo, con una buena noche, permite ver innumerables galaxias UGC, MCGC, etc. Y nebulosas planetarias Abell. Si tienes dudas, antes tienes que leer el libro "The dobsonian telescope". Este libro, un tochito de unas 500 paginas en ingles, te pondra los pies en el suelo sobre lo que es un telescopio grande. Saludos.
