Fear... no te preocupes... te garantizo que te vas a quemar... hay dos tipos de quemaduras... las voluntarias y las involuntarias.
Las voluntarias, son aquellas que estarás aguantando como un campeón varios componentes juntos... y el soldador estará muy...muy cerca del dedo... y calentando la pata del componente que mejor transmite el calor hacia tu dedo. Al primer intento... notarás calor... y soltarás... el estaño aún está fundido y se separarán los componentes sin haber conseguido tu objetivo... volverás a probarlo, y aguantarás un poco más... así, hasta... ¿has visto Kung-Fu?... cuando aguanta una tinaja llena de brasas con los brazos... pues lo mismo!!!
Las involuntarias... peligroso escribir y manejar el soldador, y más si tienes la costumbre de morder el boli... joer no quiero ni imaginarlo. En alguna ocasión me he acercado el soldador a la cara, pero los reflejos... me ha salvado del desastre... Pero eso de buscar el soldador palpando por la mesa... es peligrosísmo... sueles darte cuenta de que es el soldador por el calor.
Una diferencia entre las voluntarias y las involuntarias, es que las primeras no se ven, y las segundas te dejan o una tremenda bullofa, o una especie de callo de piel quemada endurecido, y de un color entre blanco y marrón... Bueno, algo indescriptible, pero es así.
Saludos.