Estuve revisando mis oculares japoneses VIXEN de los de "fully multicoated" and "made in Japan"... y la óptica de un kellner, "verde que te quiero verde", un Plössl, "más de lo mismo", la Barlow "la historia se repite". Y cuando de los LV se trata, pues los oscuros tonos entre rojizos-morado-tornasolados.
De algunos MEADE, concretamente un QX serie 4000, y un Plóssl de la serie 5000, pues "repiten más que el ajo". Claro que estos son chinos.
Las coloraciones son indicativas en efecto, son indicativas y sirven para que el comprador tenga una idea de por donde van las cosas. Claro que, también lo son los precios en los que están reflejadas las calidades no sólo ópticas sino mecánicas y de acabados.
Sin embargo, es una práctica común cuando se va a comprar un instrumento observar los reflejos de las ópticas orientando el instrumento hacia una fuente luminosa. Es una práctica común, ya digo, y recomendada por todos los que llevamos unos pocos años de práctica (yo desde los 10 años en que heredé unos prismáticos de mi abuelo materno y ahora tengo una hija que va a cumplir 19). Y es que los hechos son tozudos y esas coloraciones se corresponden con los revestimientos que se les haya dado.
No obstante, es de sentido común, aunque como decía Ortega y Gasset "el menos común de los sentidos", que un instrumento "barato" (póngase el precio en pesetas, que con el euro la gente se ha vuelto "anumérica"), pueda tener unos tratamientos de calidad, pues estos son precisamente lo más caro de todo el instrumento.
Pero dentro de una oferta de instrumentos baratos (los caros no cuentan ni hay que preocuparse por ellos y sus "colorines" ópticos), no es lo mismo uno con todos los tratamientos (fully multicoated) y tonalidades verdes en el objetivo, que uno sólo tratado (coated) y unas lentes azul cielito.
Y basta con ir a un establecimiento para comprobarlo, y aun mejor probarlos en observación visual y en fotografía. ¡ chao!
