Bueno... el artículo en realidad no aporta nada nuevo a todo lo que se ha dicho sobre la presencia humana en el espacio y a los planes para llevar astronautas a Marte. Lo único novedoso es que el presidente "Sarkoyes" (como empieza a ser conocido Sarkozy por su creciente tendencia a decir "sí" a todas las propuestas que vengan de EEUU) haya tomado la iniciativa en este asunto.
De todos modos, me sorprende que los periodistas sigan limitando las opciones de nuevos sistemas de propulsión a los motores térmicos de fisión tipo "Nova" (como siempre, les flaquea el trabajo de investigación). En efecto, los trabajos en este tipo de propulsión están muy adelantados, pues se lleva trabajando en ellos más de 40 años, prototipos incluidos, pero la reducción de tiempo de viaje que conllevaría su uso tampoco sería como para echar las campanas al vuelo. Además, presentan problemas de emisión de radiación.
Si de verdad se quiere viajar a Marte o a cualquier otro sitio realmente rápido para evitar problemas de exposición a radiación, de suministros y de tipo médico (físico-psicológico, lo de los polvos en el espacio es otro asunto), hay que trabajar en otra dirección y olvidarse de los viejos y queridos conceptos de los años 50 y 60: hay que apostar por nuevas y potentes tecnologías como los motores de plasma de impulso específico variable (el famoso VASIMR que pronto será probado en la ISS) y la propulsión por antipartículas, en concreto la más factible y segura sus variantes, la basada en el empleo de antiprotones (con la que se reduce al mínimo la emisión de radiación gamma). Buena parte de la investigacion básica y tecnológica al respecto ya está hecha o en curso, y se trataría de construir un motor térmico de antiprotones como el que muestra esta imagen:
Con esta tecnología, que tampoco sería algo tan revolucionario, simplemente una adaptación de técnicas ya conocidas, el viaje a Marte podría llevar tan poco como 45 días. La antimateria es muy cara, pero ahora mismo tampoco hay aceleradores construídos y optimizados con el específico fin de generar grandes cantidades (microgramos) de antimateria para aplicaciones espaciales.
Al respecto, véase el interesante artículo
New Antimatter Engine Design New Antimatter Engine Design en:
http://www.tfot.info/articles.php?itemId=33/64/
En veinte años habría tiempo más que suficiente como para poner a punto esta tecnología. Es, como siempre, cuestión de dinero y de decisión política.
Saludos