Un simil muy oportuno y que se suele utilizar en ocasiones a modo comparativo, lo tenemos en los coches. Hoy en día hay mecánicos que afirman, (yo se lo he escuchado a varios), que no hay coche malo, pero hay coches buenos, muy buenos, excelentes y superiores en todo.
La supuesta aproximación en la calidad de los instrumentos de gama baja y los de gama alta, es más aparente que otra cosa. Si bien, hay cuestiones que son verdad como por ejemplo, las políticas fiscales chinas, los costes sociales y salariales, que son escandalosos de pura injusticia para los trabajadores en aquel país, mientras que en Occidente es justo lo contrario...y todo ello acaba reflejándose en el precio final del producto.
También, se paga la Marca, naturalmente. Es que no es lo mismo llevar colgados del cuello unos Svarowski, por citar una Marca no mencionada hasta ahora, que unos de aspecto similar de Marca blanca o de padre desconocido con un "Made in China" bien visible. Pero esto funciona igual con los coches, las motos, con la ropa, con los aparatos de música, dvd, con las cámaras de fotos, o... no sé, con el hotel escogido cuando nos vamos de vacaciones (¡bufff! lo que falta todavía para ellas). Es decir, además de impuestos, costes salariales, costes sociales, "marquitis", y demás... también hay otros factores, que no voy a repetir, pero que están ahí. Y también es verdad, que es necesario hacer pruebas y más pruebas, para acabar obteniendo conclusiones.
Personalmente, para probar un ocular y sus resultados, suelo tardar del orden de unas tres noches de observación: lo aplico a distintos telescopios (tengo 5 para ser exactos), incluso en los de amigos, lo combino con barlow, con corrector de focal, con filtros, diafragmando los objetivos, y no olvidando las diferentes condiciones atmosféricas en las noches de prueba y a lo largo de ellas, pues tales condiciones varían con el paso de las horas. También recojo mis impresiones acerca de su comportamiento según las condiciones de contaminación lumínica. Y de todo ello, voy tomando debida nota en un cuaderno, y esto para saber qué es lo que he comprado, o tengo intención de comprar.
Es decir, independientemente de cualquier consideración que queramos hacer, lo cierto es que los precios, en ocasiones altísimos, de determinados instrumentos, tienen que tener alguna justificación. Si consultásemos con ornitólogos, veríamos que la mayoría no se conforma con cualquier instrumento, ¿por qué? Es más, si esos instrumentos de 800, 900, 1.000, 1.500,...euros, costasen una quinta parte, por ejemplo, ¿compraríamos los "chinos"? Para gustos colores, direis algunos, vale, pero ¿qué hariais la mayoría? ¿qué elegiríais y por qué?
Respecto a los 10X50 de Bresser, cuando digo lo de un año, lo hago extensivo a otras Marcas de 25 a 70-80 euros, y me refiero a un uso continuado. Es decir, si tengo un instrumento de 40 pavos y lo saco 25 veces en un año va a seguir funcionando bien, pero si lo uso 200 días-noches, en ese año, acabará teniendo los problemas que decía. Para quienes viven en un medio urbano, probablemente la duración será más larga que para quienes vivimos en zonas rurales. Es lógico, el "urbanita" (dicho con todos los respetos), es una persona que observa "de vez en cuando", pero si se vive en el campo, los prismáticos van contigo como el móvil o las llaves.
Por eso, si que coincido en que dependiendo de la situación personal, y de factores como cuántas veces se usan, dónde, en qué condiciones, a qué se aplica el uso, etc., va a depender en buena medida lo que debemos comprar. Si es para montarlos en un trípode y enfocar horizontalmente a efectos de observación de aves con buena luz y en comarcas secas, por ejemplo, no importa si son de esos "chinos" baratos. Pero si es para observar el cielo montados en un trípode y en zona con humedades relativas considerables, sí que conviene que tengan garantizadas ciertas prestaciones: ausencia de parcheado, que sean estancos, que con el uso las partes mecánicas no se vayan reblandeciendo...etc., etc. Por supuesto, siempre hay que considerar un factor esencial: el bolsillo. Eseeee, es determinante casi siempre.
P.D. Los mejores prismáticos que tengo son unos pequeñajos de 8X25, (por cierto, con los que empecé), y que son ZEISS-JENA con algo más de ¡¡¡ 70 años !!! Heredados de mi abuelo materno, funcionan que es una gozada, aunque hoy en día están "jubilados" y a buen recaudo, por razones lógicas.