Los mohos son delicados, con sólo raspar el hueso de jamón para sacarlos los "despachurrarás"...
Raspa un poquito de moho y depositalo en un porta, pon una gota de agua encima y con una aguja o una lanceta remueve un poquito para separar el pegotón que acabas de plantar. Por un cubre.
Deberías ver los filamentos del micelio y esporas. Si el moho era verde-azulado o gris seguramente estará cargado de esporas. Las esporas suelen ser muy pequeñas (¿verdad Marta?), pero bajo el micro son oscuras y algo distinguirás.
No dejes de ver un pelo del marrano. Siempre queda alguno en el hueso...
Otra preparacion más elaborada... y os la cuento en plan casero de narices...
lámina delgada de hueso de jamón
Con una sierra corta una rebanada de hueso lo más fina posible. Con una lima o papel de lija al agua (cuanto más fino mejor, del número 1000 sería ideal) pule una cara del hueso. Cuando termines recorta el hueso y deja sólo una pieza de unos cuantos milimetros de lado. Pega la lámina de hueso en un cubre, con la superficie pulida hacia el vidrio (no es lo ideal, pero como prueba el loctite te valdrá, lo ideal es balsamo de Canada o similar). Ahora, una vez seco el pegamento, con la pieza de hueso pegada al vidrio... lija de nuevo el hueso pero ahora por la cara contraria, la que no esta pegada al vidrio... dejalo tan fino como puedas... que quede transparente y ponlo al micro... mejorará si pones una gota de agua encima y un cubre.
Deberias poder ver algo como esto:
Esta técnica se usa (aunque hecha más finamente) para estudiar secciones de conchas, huesos y rocas. Como veis, en vez de microtomo se pule la muestra. la muestra se pule con series seriadas de carborundo, cada vez más fino, se pega al porta y se vuelve a pulir con series de carborundo de diferente granulometría. podeis imaginaros que las superficies pulidas quedan paralelas, eso es debido a que se hace con utillaje de precisión.