
He leído muchas veces, y también lo he escuchado aunque menos, que por los oculares no hay que preocuparse cuando se cambia de telescopio, ¿seguro? En este mundillo de la observación amateur hay muchos tópicos, como pasa en casi todo, admitidos como verdades que luego con demasiada frecuencia no se corresponden con los hechos tanto como se suele suponer. Campo ancho o estrecho, relieve alto o bajo, no digamos el diseño, por supuesto descartados los de una pulgada y en cuestión una parte de los de pulgada y cuarto. Pero cuánto de verdad hay en lo que creemos, porque después llegan las sorpresas, a veces negativas y otras más positivas de lo esperado o imaginado.
Hay mucha tendencia a dejarnos llevar por criterios comerciales, y mucho menos por los técnicos y por la experiencia personal a pie de telescopio durante muchas horas a lo largo de las sesiones de años enteros. La continua oferta basada en el afán por la novedad, en la búsqueda de una supuesta perfección, no encierra sino la conveniencia comercial de fabricantes, importadores y vendedores. Vamos, que esto como lo de encontrar la pareja para toda la vida, sólo que en este caso hay más posibilidades de acertar a nada que se tenga un poco de perspicacia y no se pretenda tener el mejor equipo por tenerlo, ése mismo que no existe más que en la imaginación.
En el enlace siguiente hay todo un tratadillo de las ópticas de los oculares, descripción de sus diseños, las focales, del campo, el relieve y los tratamientos. Está en Inglés, pero si hay dificultades para leerlo, con darle al botón derecho del ratón y pinchar en "traducir al español" dará la oportunidad de leer y pensar acerca de lo que tenemos en casa. Por supuesto, habrá quienes digan que ya lo sabían y que han acertado en su elección. Enhorabuena para quienes así piensen, pero no todo el mundo está igual.
https://www.handprint.com/ASTRO/ae5.html
Saludos.
