Anoche, día 10 de septiembre de 2007 dediqué la noche a la observación de cielo profundo con los Celestron 15x70, lo que me recordó que tengo que comprar un trípode urgentemente o acabaré siendo apto para practicar la alterofilia. Me guié con el "Binocular Certificate Handbook", de la Irish Federation of Astronomical Societies. Las condiciones eran bastante malas, con una fina capa de bruma que veía aumentado su brillo por el reflejo de las luces de la ciudad. El reporte es el siguiente:
M22: Cúmulo globular de la constelación de Sagitario. Por los 15x70 se presenta como una mancha blanquecina de considerable tamaño. Perfectamente visible con observación directa y muy fácil de localizar. Resultó imposible distinguir ninguna estrella en su interior.
M8 (Laguna) y M20 (Trífida): Ambas en Sagitario, aparecían las 2 en el campo de los prismáticos. M8 se presentaba muy brillante, con algunas estrellas en su interior y alrededor. M20 era más tenue, pero también fácilmente visible. Se observaban perfectamente las estrellas de su interior, y acostumbrando la vista a la oscuridad y empleando la visión lateral era posible intuir las franjas oscuras que cruzan la nebulosa.
M39: Cúmulo bastante abierto del Cisne. Ofrece un bonito contraste por sus estrellas azules y rojas. Muy fácil de localizar partiendo de Deneb.
M29: Cúmulo del Cisne catalogado como abierto, aunque a través de los prismáticos es más parecido a un globular. Resulta algo complicado distinguirlo, ya que la región donde se encuentra es muy rica, pero visible como una manchita blanquecina. Si ladeamos la vista podemos distinguir una multitud de pequeñas estrellas en su interior. Fácil de localizar desde "y del Cisne", ya que entra en el mismo campo que la estrella.
Albireo: Esta doble tan conocida tiene, si cabe, más magia al ser observada a través de los prismáticos, ya que aparece como una doble muy junta, y perfectamente distinguibles los colores de ambas componentes.
M31 (galaxia de Andrómeda): Sencillamente impresionante, ocupaba todo el campo de visión.
M57 (el anillo): Se veía como una estrella algo desenfocada, y por supuesto, sin ninguna forma de anillo, pero resulta una grata sorpresa cuando se sabe lo que se está buscando. Si no se sabe pasa perfectamente como una estrella, pero si nos fijamos veremos que no es como las demás.
También intenté localizar la nebulosa Norte-América, que según el libro es un objeto fácil, pero me resultó imposible, tal vez por la contaminación lumínica. M16 tampoco la pude localizar, no sé si por la contaminación lumínica o porque no fui capaz de llegar hasta el sitio.
Bueno, espero no haber aburrido demasiado al personal, pero tal vez le sirva a algún aficionado principiante y no tan principiante.
Un saludo
