El tema de los buscadores da para charlar bastante. Es cuestión de gustos, si bien algunos no son muy buenos, uno puede acostumbrarse. En mi caso tuve los dos, uno de punto rojo y ahora con el Hokenn 130/650 (SW de Arg) tengo un 6x30. Como comencé con el de punto rojo, pasar al actual buscador, me costó al principio. Pero luego uno se acostumbra. Es cierto si uno desconoce la ubicación exacta del objeto que desea observar, la tarea se facilita con un objetivo de 6X30 o mayor aún.
Por eso, en caso de ser demasiado incómodo y no poder acostumbrarse, pasar a un buscador un poco más "grande" para disfrutar la observación y no perder más tiempo buscando que observando. Siempre pensando en la limitación del peso sobre la montura.
Buenos cielos!
). Me hacía ilusión probarlo, aunque probablemente no fuese de mucha calidad, pero que le vamos a hacer. Mientras no consiga un Rigel Quickfinder trataré de adquirir un láser barato, como propone Enterprise. Y cuando me asegure de que puedo acoplar un buscador óptico a mi teles me haré con uno de algo de calidad, preferiblemente que sirva para futuros telescopios, ya que seguro que el que ahora poseo no será el último.
) para conseguir una alineación más o menos decente (me ha llevado 1 minuto alinearlo). Resultado: no hay objeto visible a simple vista que se me resista
. Ni punto de comparación con el no-buscador del astromaster 130eq. Ahora, por ejemplo, saturno lo tengo en el ocular en segundos, antes tardaba no menos de 5 minutos, más bien 10 y con suerte (bastante desesperante). Pero no todo son bondades: a medida que se va enfriando va perdiendo potencia y, por tanto, efectividad, aunque de momento no he llegado al punto de que no sea útil. Conclusión: yo recomiendo a aquellos que tengan un telescopio como el mio la adquisición de un laser verde como sustitución del no-buscador de punto rojo, eso sí, siempre y cuando se utilice sin molestar a nadie.


