Mensajepor Avicarlos » 31 Jul 2015, 13:09
Voy a contar de modo llano lo que conseguí tras seis años de pedir información para poder dibujar, o mejor dicho, formarme una idea gráfica de lo que es el fotón y cómo se comporta. Tuve que leer muchos mensajes de doctos que me recomendaron libros. Unos en Inglés y otros en Español. Me salté los primeros por mi poca instrucción en la lengua de Shakespeare. Y de los últimos, elegí unos clásicos ( de hace treinta años), seguidos de otros actuales por autores de reconocida fama científica.
Por la Red, especialmente merced a Wikipedia, al Rincón del Vago, y otras páginas acreditadas, disponen de mucha mayor información y detalle de lo que puedo narrar, pero en ningún lado vi un dibujo que formara en mi cerebro una imagen real.
Dos fueron los motivos que a mí me entorpecieron la labor y supongo al resto de especialistas en cuántica el que sólo representaran al fotón como una línea ondada. Y como mucho, un punto, centro de una esfera, representativa del alcance de su manifestación energética más eficaz.
Luego se cuenta como los fotones solo existen con la fuerza “momento” que les proporciona la velocidad constante de toda partícula sin masa. Ya dispongo pues de una base que es la de la velocidad de la luz, que trae a cuestas al fotón. Pero además como esto es muy parecido a la nada, se recurre a señalar que son “cuantos de energía” y que mostrándose por el Espacio, lo hacen por cantidades de vértigo. Pueden realizarlo siempre a la misma velocidad pero unas veces con un valor de energía pequeño, y en otras con distinto valor, creciendo hasta lo que han dado a suponer como límite de lo conocido que son las ondas de los Rayos gamma procedentes del Cosmos profundo.
Todo merced a científicos como Feynnman, Einstein, Schrödinger, De Broglie, …..y muchos más, se consiguió con la escala de Planck, obtener verdaderas maravillas en adelantos técnicos, hasta que Higgs, nos desveló algo más de lo misterioso que es el fotón.
A todos tuve en cuenta y como solución a mi curiosidad, me decidí a representar al “FOTÓN”, suelto, solitario, ajeno a la formación obligada en la Naturaleza de discurrir junto a sus clones en misma fase, u otros con fase distinta, incluso contraria, lo que en ciertos instantes anula la energía en un sentido con la del contrario.
También le acompañan ya no clones como él, sino también unos de energía superior y otros de inferior. Y lo mismo atravesando espacio en el que además de variadísimas energías en cualquier sentido de su desplazamiento, existen partículas con masa, entorpeciendo la circulación.
Con lo dicho queda especificado que este “cuanto”, actúa como una onda, y matemáticamente así se enseña y se obtienen resultados creíbles, además de ser útiles para crear aparatos ópticos, mecánicos, aplicaciones médicas, informática y las nuevas tecnologías para navegación espacial, o el dominio nanotecnológico.
Aplicando la escala de Planck, admito que el tiempo, que usualmente fragmentamos en segundos, de manera ideal se podría llegar a instantes de cero segundos absolutos y con ello un segundo dispondría de un número que por indeterminado le llamaríamos infinito.
Planck nos da la idea al menos para ser prácticos y poder realizar cálculos, que el instante lo es de un valor fraccionario del segundo tan pequeño, como el de 10 elevado a cuarenta y cuatro, lo que se representa por 10^-44 s y ello significa, que el tiempo deja de de ser continuo para proceder a saltos. Concretamente 10^44 saltos para llegar al transcurso de un segundo.
¡ Ah!, Y como los fotones viajan a la velocidad de luz, con esta cantidad que marea de saltos, llegan a recorrer trescientos mil kilómetros. Cada saltito pues, se traslada una distancia de 10^-33 cm. Sí otro valor que nos da la escala de Planck.
Si entre una posición y la siguiente del fotón, media el tiempo del instante Planck. La distancia mínima existente es la de un valor tan minúsculo como el de la fracción del cm 10 elevado a treinta y tres veces.
Con ello ya dispongo de dos dimensiones a aplicar: El Tiempo y la distancia. Veamos la más importante que diferencia a los “cuantos”, su Energía, que usualmente se valora en Julios.
La constante de Planck. No da el valor de 6,626 * 10 ^-34 J multiplicado por la frecuencia, que es la cantidad de veces que esta energía actúa durante un segundo.
Es pues la energía que dispone el cuanto mínimo en un instante y nos da redondeando 10^-78 J que es lo que señalo en el gráfico A.
Lo que hace el fotón de mínima energía, es manifestarse en una burbuja ideal que inicia con un diámetro 10^-33 cm en que ejerce su fuerza eficaz, como si de una corteza elástica lo encapsulara y al instante siguiente, el diámetro de esta burbuja, recorre un espacio a la par que crece también el diámetro de este instante. Al cabo de un segundo esta ideal burbuja, o esfera, habrá adquirido el diámetro de 10 elevado a 54 cm que le otorgó un solo latido.
En el gráfico, por lo extraordinariamente pequeña de esta dimensión, es imposible dibujar esfera alguna, por lo que se grafían rayas representativas. Y nada menos que en 10 elevado diez instantes, han crecido estas burbujas desde su tamaño original, hasta el de 10^-23 cm
Seguirá creciendo, hasta que en el transcurso de un segundo que alcanzará la distancia de 300 mil Kilómetros multiplicado por 10 elevado a 34 redondeando. Es por su más baja frecuencia supuesta. Por ello se llama longitud de onda a esta colosal medida que en realidad no es una onda sino el latido de una esfera, o burbuja. Esta misma medida, es el diámetro alcanzado, por lo que la esfera habrá avanzado esta distancia y se mostrará como esfera en el espacio, que abarcará su energía mínima en todo su ámbito y que será la mitad hacia adelante y la mitad hacia atrás.
Tal como dije a pesar del intento, es imposible grafiar cifras tan enormes en distancia, con pasos y diámetros del fotón tan insignificantes. El valor de tal energía equivale al de 10^-92 gramos masa. En la Naturaleza, teóricamente pueden existir, pero en la práctica es imposible aislar a este cuanto.
Veremos a otros fotones como el del gráfico C correspondiente a la energía básica que es la constante de Planck con la frecuencia de 1 Hz.
Significa que en un segundo, el fotón ha realizado un solo latido. Ha expandido para volver a su dimensión inicial en una longitud de tres cientos mil kilómetros y por ello la burbuja ocupa este punto presentando un diámetro igual. Disponiendo pues de tan pequeña energía que además la presenta en un volumen enorme, se intuye que para resultar sensible, requiere que no se trate de un solo cuanto, sino que debe albergar gran cantidad de ellos.
Y lo de que puede hallarse en cualquier lugar, es evidente que sí, pero con la condición, que no busquemos en lugares ajenos, fuera de tal burbuja.
Saludos de Avicarlos.